domingo, 31 de mayo de 2009

SOL - MAR

Se entrelaza el sonido de olas ardientes
-en tardes doradas de este Sol de noviembre-
con un gemido cautivo en el pecho
que desato en las noches cuando ya no vuelves.

Claman las pasiones sobre el lecho frío
con la intensidad del vuelo que une las mentes.
Te llamo en silencio, pronuncio tu nombre,
que me sabe a raros elixires.

Y te siento cerca, allí en el espacio
donde se acurrucan los cuerpos agotados
luego del instante de ser poseídos.

Aúllan las voces del alma y la carne
por sentir los labios recorrer las pieles
erizadas y húmedas de gozo y placeres.

Y en la sinfonía que sueltas al aire
en cada palabra cuando reapareces,
sé que eres tan mío, como lo es tan tuyo
el paisaje agreste que cubren las nieves.

Lucy Iaq

jueves, 28 de mayo de 2009

Si alguna vez... (Sol)



Si alguna vez
intentas mi nombre,
recuéstate un poco
sobre aquel pasado,
descansa y espera...

- Será al día siguiente -

Lo hallarás en el lila
de los amaneceres.
Cuando la luz invada
la inmensidad
de las eternas nieves.

O será en el monte
de tus travesías.
En hongos dorados
por destellos mágicos.
En algarabías
de hadas y duendes.

Será en las distancias,
en las lejanías,
en el equilibrio
de voces ausentes.
(En esperas vanas
de abril y noviembre)

Será leña seca
en los mediodías.
Tibiezas de ambientes
El mantel, el pan,
la jarra de vino.
Sobremesa larga...
(Miradas profundas
que barrió el destino)

Será Sol... simplemente
llenando vacíos
Dándole vida a tu vida
desde la permanencia.
Inquietudes fugaces
a través del tiempo.

Ardientes hogueras
¡ Jamás extinguidas!


Lucy Iaq

miércoles, 6 de mayo de 2009

Mortajas

En el arco de la vida
lo trascendental de las palabras
llega y se esfuma
entre verdes, rojos, azules y lilas

El blanco elocuente
lastima impío el pensamiento,
desde ese lugar
repleto de impuestos silencios.
(del ayer y del presente)

A viva voz
y con total certeza,
proclama:
¡Están aquí Tus Mortajas guardadas!

( Vinieron
adheridas a tu piel
aquella mañana...)

Lucy Iaq

Adiós

He de decir adiós a los silencios
Esos silencios siniestrales
donde sólo se escucha
el aleteo de un ave que se aleja
en busca del amparo de otros cielos,
donde los soles más calientan,
donde los amaneceres son más rojos,
donde la plenitud del amor no duele,
no duele tanto... No, no tanto
como en este abismal letargo
de horas cinceladas a cuchillo.

Remontó el ave sin rumbo fijo
Se va, se va, ya no regresa.
Y el clamor de una voz arrodillada
se levanta, cae, se desliza...
Poco a poco se vuelve mutismo.

Lucy Iaq

Invocación

Con las nostalgias de un tango
sin bandoneón ni guitarras,
desde papeles enmohecidos,
un alma invoca un nombre:
“Para ti, donde quiera que estés, amigo”

(Clamor de amargas ausencias
amarradas al recuerdo
de noches de canto y vinos,
de historias y poemas
de aquel errante peregrino)

Se hace luz en las sombras
Y al crepitar del sonido
una voz en la distancia
responde...
¡Aquí estoy, he venido!

Lucy Iaq